Aguas frescas es el nombre que se da en México a un tipo de bebidas no alcohólicas a base de agua, frutas o granos, y azúcar, muy utilizadas en la gastronomía mexicana durante el almuerzo o comida.
Las aguas frescas más populares son el agua de jamaica, de limón o limonada, de naranja onaranjada, de tamarindo y de horchata de arroz.
Se beben frías y se consumen especialmente de primavera a otoño, aunque se les puede conseguir todo el año. Por ser favorecidas en clima caliente, es común que de las aguas frescas de frutas se deriven paletas congeladas.
Además de granos y flores, las aguas frescas pueden ser hechas de frutas dulces, que pueden o no incluir azúcar, o de frutas ácidas; en ambos casos se evitan las semillas, pues suelen ser amargas y alterar mucho el sabor del agua.
Los ingredientes y formas de preparar no siempre suelen ser los mismos, pueden variar dependiendo en la zona de la república en la cual se encuentre, muchas veces se combinan diferentes frutas, semillas o algunas plantas para crear sabores más agradables.
- Horchata, se prepara casi siempre de arroz, pero a veces de avena, y se perfuma con vainilla; en algunas ocasiones se añaden fresas (horchata con fresas) o con coco (horchata de coco) y en Mérida se le agrega almendras a la de arroz. Un ingrediente que nunca falta en su preparación es la canela.
- El agua de Jamaica, agua de flor de Jamaica o té de hibisco es una infusión hecha de cálices (sépalos) de la rosa de Jamaica (Hibiscus sabdariffa). Tiene un sabor agrio, parecido al del arándano, añadiéndose a menudo azúcar para endulzarlo.Es una de las aguas frescas o bebidas baratas hechas típicamente a partir de zumo fresco o extractos. El agua de flor de Jamaica suele prepararse macerando los cálices en agua hirviendo, colando la mezcla y prensando los cálices (para extraer todo su jugo), añadiendo azúcar y removiendo.
Se sirve fría.